Soy un viajero frecuente desde hace un poco menos de veinte años. En ese momento y gracias a mi negocio, pude comenzar con una pasión por viajar, que ni yo mismo creí tener.
Los primeros lugares se dieron a partir de esta “excusa laboral” y, pronto, pude hacerme de una frase que repito cada vez que tengo oportunidad a quien quiero que se anime: “Viajá. El dinero se recupera, el tiempo no”.
En todo este tiempo, conocí más lugares de los que nunca hubiese soñado, pero hoy te digo que menos de los que me hubiese gustado visitar.
Ahora bien, quién no se hizo alguna vez la pregunta: “si no viviese en el lugar que vivo, ¿dónde sería capaz de permanecer?”.
Claro, uno tiene que saber que no es lo mismo estar de vacaciones que experimentar la rutina en otra parte, pero los invito a hacer el esfuerzo de imaginarse, por un momento, viviendo en alguno de los lugares del mundo que conocen. ¡Ojo! No necesariamente me refiero a haber puesto los pies allí. Hoy día, con la tecnología, es muy fácil viajar a cualquier lugar de la Tierra, pero no es menos cierto que las vivencias son difíciles de transmitir a distancia.
En fin, en esta nota, quiero compartirles las 3 ciudades en las que podría vivir sin problemas, obviamente, descontando la Ciudad de Buenos Aires que es donde nací y vivo actualmente.
- Nueva York: ¡El lugar! NYC son miles de ciudades en una, desde lo étnico, lo cultural, lo gastronómico, etc.
Es una metrópoli que conozco en las cuatro estaciones del año, y todas tienen su encanto. Cada vez que vuelvo, descubro lugares nuevos e impactantes. Estimo que, a raíz de mi gusto por el cine norteamericano de Woody Allen, por ejemplo, la ciudad me resulta completamente acogedora y un lugar para quedarse a vivir sin dudas. Veselka y su Ola’s famous veal goulash, por solo mencionar una de las cientos de cosas que me gustan del lugar. No quiero extenderme demasiado sobre “la gran manzana” porque voy a volver con muchas notas más.
- Madrid: Desde la primera vez que la visité, la sentí mi casa. Podrá ser por el idioma, quizás el parecido arquitectónico con Buenos Aires, o simplemente, por esos tapeos maravillosos del Mercado de San Miguel que se encuentran en cada esquina. Madrid tiene un aroma a cosa cercana a mí que me deja pensar que no soy un turista.
- Búzios: La dejé para el final, quizás porque la tengo asociada a un posible retiro cuando me ponga viejo. Búzios es la praia dos Ossos donde podés bañarte en un agua tan calma como la de una piscina, es el Bar Do Zé para degustar un ceviche de camarones de ensueño, o la Pousada Byblos donde mi amigo Joel te puede hacer sentir el dueño del lugar
Como verán, por diversos motivos, cuando yo me puse a imaginar dónde podría vivir en algún momento de mi vida, consideré en estos tres destinos, para mí uno más hermoso que otro.
Y vos, ¿ya pensaste cuáles son los tuyos?
Yo viviría mis últimos años en alguna (o todas) de estas opciones:
– los pueblos del sur de Italia.
– la bretaña francesa
– la campiña inglesa.
AS GORDAS!
O MELHOR MILHO DO BUZIOS
TEIM TAMBEIN CALDO DO CANA PRA VOCE
E AMENDOIS PRA FICA MALHUCO!
Más pronto que tarde, querido hermano cangrejo 😉